También llamada “párpado caído”, es una afección causada por debilidad del músculo responsable de levantar el párpado, por daño a los nervios que controlan esos músculos o por flacidez de la piel que rodea los párpados superiores.

El párpado caído puede ser causado por el proceso normal de envejecimiento, una anomalía congénita (presente al nacer) o como resultado de una lesión o enfermedad.

Los factores de riesgo abarcan envejecimiento, diabetes, accidente cerebro vascular, síndrome de Horner, miastenia grave y un tumor cerebral u otro cáncer, los cuales pueden afectar las reacciones musculares o nerviosas.